Información de Plantas tradicionales útiles para combatir los problemas oseoarticulares.
HARPAGOFITO
(Harpagophytum procumbens DC.)
Familia: Pedaliaceae
Partes utilizadas: raices secundarias.
Principales constituyentes: iridoides (principalmente harpagósido, procumbido y harpagido), beta-sitosterol, ácidos triterpénicos, flavonoides.
Actividades principales: antiinflamatoria, analgésica, espasmolítica.
GROSELLERO NEGRO
(Ribes nigrum L.)
Familia: Saxifragaceae
Partes utilizadas: hojas
Principales constituyentes: flavonoides (hipe-rósido, astragalósido, glucósidos del kaepferol, quercitina), vitamina C, terpenos.
Actividades principales: antiinflamatoria, antireumática, diurética, tónica general, vasoprotectora.
El Ribes nigrum, conocido por su importante actividad antiinflamatoria, se utiliza también en el tratamiento de las manifestaciones articulares dolorosos, tanto las agudas como las crónicas. El tratamiento con extracto seco de hojas de Ribes nigrum ha demostrado una considerable reducción del número de células inflamatorias, concretamente los macrófagos.
Esta actividad se realiza en parte por la acción de los flavonoides, que se oponen a la liberación de las sustancias proflogógenas y que producen una mejoría en la microcirculación, por lo tanto de la vascularización local, gracias a su acción vitamina P-like.
ULMARIA
(Filipéndula ulmaria L.)
Familia: Rosaceae
Partes utilizadas: sumidades floridas
Principales constituyentes: derivados flavóni-cos (spireósido, hiperósido, rutósido), aldeide sali-cílica, aceite esencial.
Actividades principales: antiinflamatoria, antireumática, diurética, antispasmódica.
La ulmaria es una planta que tradicionalmente se utiliza en el tratamiento sintomático de las manifestaciones articulares dolorosos menores, de los estados febriles y gripales y de la cefalea. Por su composición química a base de salicilatos (en efecto se define «salicilato vegetal»), la Ulmaria posee una acción antiinflamatoria y analgésica.
El fitocomplejo de la Ulmaria inhibe selectivamente la síntesis de las prostaglandinas, sobre todo las responsables de los dolores reumáticos (PGE2); por este motivo no produce gastralgias, efectos indeseables causados por los normales antiinflamatorios de síntesis. Estos al inhibir totalmente la síntesis de las prostaglandinas (PGE e PGI2), impiden la normal producción mucosidad gástrica, que en condiciones fisiológicas normales protege las paredes del estómago.
También es valiosa su actividad diurética en el tratamiento de los problemas articulares, facilitando la eliminación de derrames articulares.
UÑA DE GATO
(linearía tomentosa DC.)
Familia: Rubiaceae
Partes utilizadas: corteza del tallo y de las raíces de plantas adultas, extraídas antes de la floración
Principales constituyentes: alcaloides oxindólicos pentacíclicos (pteropodina, isopteropodina, mitrafilina, isomitrafilina, rincofilina, isorinco filina) y glucósidos triterpénicos, procianidinas, sitoesterolos.
Actividades principales: antiinflamatoria, analgésica, cicatrizante, antiviral, inmunomodulante e inmunoestimulante.
Los principios activos contenidos en la corteza de la uña de gato (alcaloides oxindólicos tetracícli-cos y pentaciclicos) hacen que esta planta posea propiedades immunoestimulantes e inmunomodulantes.
Por estos motivos la Uña de gato es considerada una planta útil para combatir los dolores de origen inflamatorio como las artrosis, las artritis y el reumatismo, además de reforzar el sistema inmunitario.
Las propiedades antiinflamatorias se deben a la notable presencia de derivados del beta-sitosterol.
ENEBRO
(¡uniperus communis L.)
Familia: Cupressaceae
Partes utilizadas: bayas
Principales constituyentes: Pineno, Terpineno-4-olo, beta-Cadineno.
El aceite esencial de enebro posee una acción diurética y antiséptica.
Actúa a nivel de los riñones aumentando la actividad de la secreción urinaria. Favorece la resolución de los estados edematosos que a menudo acompañan la inflamación articular en los casos de problemas reumáticos.
CIPRÉS
(Cupressus sempervirens L.)
Familia: Cupressaceae
Partes utilizadas: ramas jóvenes
Principales constituyentes: beta-silvestreno, alfa-pineno.
El aceite esencial de ciprés, además de sus otras muchas propiedades, se conoce por su potente acción diurética y sudorífica, a tal punto que se utiliza para combatir las fiebres intermitentes con una eficacia comparable a la de la quina.
En particular, resulta apreciable su actividad en la patología articular ya que tiene un óptimo potencial diurético que favorece la resolución de estados edematosos que a menudo se manifiestan con inflamación articular.